Más que una forma de decorar las paredes de tu local, integrar obras de arte en tu negocio puede marcar la diferencia en la experiencia del cliente, pero también de las personas que trabajan para ti. ¿Esto te intriga? Continuar leyendo…
¿Qué puede aportar una obra de arte a tu negocio?
Has construido tu negocio y te sientes muy orgulloso de ello. Tienes valores, una misión y una visión de empresa, y esto ayuda a aumentar el sentimiento de pertenencia a la misma. Agregar obras de arte a su entorno de trabajo permitirá que cualquier persona que cruce sus puertas experimente esa visión y esos valores y sienta la emoción que de ello se desprende. La obra de arte es entonces la puerta de entrada a la experiencia del cliente; Crea un ambiente acogedor y atrae la mirada. Ya sea para usted, para sus empleados, para sus clientes o para sus invitados, contemplar un cuadro o una escultura original no deja indiferente a nadie.
Varios tipos de empresas utilizan el arte en la oficina; Por ejemplo, varias obras se exhiben en vestíbulos, salas de recepción, comedores e incluso en las habitaciones de hoteles y posadas. Estas empresas, sin saberlo, han dado un lugar cada vez más importante a la promoción del arte contemporáneo. De esta forma, contribuyen a apoyar el trabajo de artistas de aquí y de otros lugares y hacen que el arte sea accesible a todos.
Los beneficios de tener una obra de arte en tu oficina
Integrar una obra de arte en tus instalaciones te permite expresar la filosofía de tu empresa, reflejar la imagen que quieres proyectar y crear un sentimiento de pertenencia de tus clientes hacia la misma. Observar una obra de arte crea una armonía visual que tranquiliza la mente y aporta una sensación de bienestar.
El aspecto humano y la productividad
¡Y eso no es todo! El arte en los negocios es un vector de crecimiento. Al fomentar las interacciones y los debates entre sus equipos y estimular su creatividad y espíritu de innovación, crea una actividad de team building por excelencia sin tener que planificar nada. La obra de arte en sí misma genera el efecto de compartir e intercambiar. Además, implicar a los colaboradores en la elección de las obras garantiza el éxito del ambiente laboral y les permite identificarse con la empresa, sentirse parte del equipo.
El aspecto estratégico y la rentabilidad
A nivel corporativo, la obra de arte es una herramienta tanto estética como estratégica. Te permite:
- Añade carácter y estilo a tus oficinas
- Cambia la atmósfera que quieres transmitir en tu negocio
- Ayuda a profundizar tu identidad visual, lo que te diferencia de la competencia.
¡De hecho, el arte es una herramienta de comunicación única!
Además de todos estos beneficios y valor añadido a tu negocio, cuando utilizas arte en la oficina, promueves y apoyas económicamente a los artistas así como a la galería de arte. Y también te permite reducir tus impuestos. ¡Sí, por supuesto! Apoyar a un artista canadiense comprando una obra de arte le otorga una ventaja fiscal. ¿Cómo funciona? Al exhibir la obra en sus oficinas, podrá reclamar una deducción por depreciación correspondiente al 33,33% de su coste de adquisición a nivel provincial y al 20% a nivel federal. De esta manera el importe invertido en tu compra se reparte en el tiempo.
Recuerde que las obras de arte deben exhibirse en su oficina, no en su residencia personal. Por otro lado, si eres autónomo, por ejemplo contable, masajista, psicólogo, etc., y tus oficinas están situadas en tu domicilio, igualmente podrás obtener esta deducción.
¡Para saber más sobre los beneficios fiscales!
En resumen
En resumen, no importa si eres una gran empresa o una pequeña PYME; Cualquier empresa puede beneficiarse de la oportunidad de exhibir obras de arte en su lugar de trabajo y disfrutar de los beneficios definitivos que esto conlleva. Tú decides !